EL ORIGEN DEL PAPEL

Diferentes soportes de escritura

El papel surge por la necesidad del ser humano para expresarse, para plasmar su pensamiento. Los primeros humanos ya utilizaban como forma de expresión simbólica las paredes de las cuevas o los huesos de animales. Más tarde utilizaría materiales como láminas de cera, arcilla u oro, pero también emplearía tablas de madera, metal y barro. Pero todos estos materiales utilizados como soporte de escritura evidenciaban dificultades de utilización.

Los egipcios fueron los que primero sustituyeron los antiguos soportes de escritura, por los rollos de papiro, un material mucho más ligero y fácil de manejar porque estaba hecho con un tipo especial de junco "Cyperus Papyrus", que crecía a orillas del Nilo y cuyos juncos se cortaban en finas láminas, se enlazaban, se prensaban y se dejaban secar. De hecho la palabra "papel" deriva etimológicamente de la palabra "papiro".

Pero el uso del papiro se fue diluyendo en favor de otro material como fue el pergamino, utilizado por los persas y lo hebreos. Este nuevo material de escritura se desarrolló en Pérgamo ( ded ahí el nombre) y se fabricaba a partir de piel de res o de cabra, la cual se lavaba y se pulía con piedra pómez, de manera que se podía escribir sobre él por ambas caras. Cada una de las hojas se cosían en forma de cuaderno, que después se agrupaban en "códex" (códice) la forma más antigua del libro.

Ts'ai Lun, inventor del papel

El descubrimiento del papel como tal se dió en China, y según las crónicas históricas chinas hacia el año 105 d.C, atribuyéndosele a Ts'ai-Lun, que fue consejero imperial  del emperador Hai, perteneciente a la dinastía Han oriental. El descubrimiento sería por solicitud de la corte imperial, que reclamaba un material más fácil de utilizar y conveniente para la escritura. Ts'ai Lun presentó al emperador un proceso para la fabricación de papel que consistía en la realización de una mezcla en la que utilizaba la corteza cocida de la morera, bambú, cáñamo, mezclándolo con trapos viejos y redes de pesca, y todo ello al pasarlo por un tamiz y dejar que posteriormente se secara, resultaba una hoja de un blanco resplandeciente. El emperador quedó muy satisfecho del resultado y concedió a Ts'ai Lun riquezas y titulos aristocráticos, pero también se cuenta que tras participar en intrigas palaciegas, y ser condenado por ello a penas de prisión, decidió suicidarse.

Durante mucho tiempo la fabricación del papel en China se mantuvo en secreto, y no llegó a Japón hasta el siglo VII y tendrían que pasar más de 600 años hasta que en el año 751 y tras la batalla de Talas, que enfrentó a los ejércitos árabes del califato abbasí y los ejércitos chinos de la dinastía Tang, y en la que se produjo la derrota china que tuvo como consecuencia el que muchos chinos fueran capturados y algunos de ellos indicaron como oficio la fabricación de papel. Con los árabes la difusión del papel y su fabricación se expandió por todo el mundo islámico, y desde allí y, gracias a la Ruta de la Seda, su difusión y uso se extendería por Europa, convirtiéndose en una mercancía muy apreciada. De hecho, gran parte de la cultura clásica llegó a Europa a través del papel árabe.

Ruta de la Seda

Por tanto,  puede decirse que la invención del papel proporcionó al hombre un soporte seguro, donde habitara la memoria escrita en su recorrido a través de la historia, y gracias a su consistencia y durabilidad, los textos de nuestros antepasados siguen siendo un testigo fiel de su tiempo.

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Referencias:

Asociación Hispánica de Historiadores del Papel